El papa Francisco apuntó este miércoles que la economía liberal no acepta el término de “justicia social” y alertó que ello supone un riesgo porque “esto significa dejar crecer las desigualdades sociales y las injusticias”.
“Es importante centrarse entre la relación del trabajo digno y la justicia social (…), un término que no es aceptado por la economía liberal, por la economía de punta”, afirmó el pontífice e una audiencia privada que sostuvo con miembros de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en la que también estuvieron presentes sindicalistas y religiosos.
“Es el de aceptar pasivamente lo que sucede a nuestro alrededor, con cierta indiferencia o bien porque no se está en condiciones de encuadrar problemáticas a menudo complejas y de encontrar respuestas adecuadas a ellas”, apuntó el Papa Francisco como un riesgo de las sociedades modernas.
Respecto a las condiciones de trabajo de las personas en el mundo, el mandamás de la Iglesia católica señaló que “es fundamental que estén relacionadas con los impactos ambientales, prestando mucha atención a los posibles efectos en términos de salud física y mental de las personas afectadas, así como de seguridad”.