Con un corazón enfermo, que por momentos ha dado la impresión de no querer continuar con su latir, José Carlos inició desde los 7 años tratamientos y supervisión médica en manos de médicos especialistas del IMSS, quienes lo han ayudado a seguir adelante.
Desde esa edad, comenzó a recibir tratamiento por un bloqueo de flujo sanguíneo, (estenosis pulmonar), comunicación interventricular (CVI, es un defecto de nacimiento en el corazón, en el cual hay un orificio en la pared que separa los dos, además de insuficiencia de la válvula aórtica, que se produce por el cierre defectuoso de la válvula aórtica, que genera una fuga de sangre desde la aorta hacia el ventrículo izquierdo en cada latido.
Este tipo de cardiopatías congénitas llegan a presentarse en 8 de cada 1,000 menores al nacer, y con tratamiento oportuno 9 de 10 llegarán a la vida adulta.
La jefa del Servicio de Cardiopatías Congénitas del Hospital de Cardiología, del Centro Médico Nacional (CMN) del IMSS, doctora Lucelli Yáñez Gutiérrez, mencionó que José Carlos presentó una malformación del sistema cardiovascular, lo que ha requerido atención especializada desde el primero momento que llegó al instituto.